Estamos en: Lenguas del Mundo > Familia Altaica > Rama Mongola > Lengua Santa
Lengua Santa

Historia

A consecuencia del hundimiento de la administración Yuan en el siglo XIV se produjo el aislamiento de varias guarniciones mongolas en varias partes de China, lo que originó varios enclaves de habla mongola en China que sobreviven hasta el día de hoy. Al estar aisladas de las zonas principales de habla mongol estas lenguas comparten ciertas características arcaicas y muestran una tendencia a adoptar otras de matiz sino-tibetano, que es el ambiente lingüístico que las rodea.

Datos

La lengua santa (dongxiang) es hablada en el noroeste de la provincia china de Gansu por unas 200.000 personas, siendo la mayor parte de ellos granjeros y, al igual que sus vecinos hui, los santa son musulmanes. El conjunto completo de la nacionalidad santa es de algo más de 500.000 personas. El nombre chino es dongxiang, que significa 'municipio oriental'.

La lengua pierde vitalidad ante el chino con mayor rapidez que su vecina monguor. Se puede considerar potencialmente amenazada.

Dialectos

 

Escritura

La lengua no ha sido puesta por escrito.

Gramática

Las reglas de la armonía vocal están muy deterioradas o perdidas. Retiene la x inicial y la f, mientras que el mongol literario y el moderno tienen la vocal inicial.

La lengua santa recuerda a la dagur en muchos aspectos. Ha preservado la inicial h del mongol medio, como hulan 'rojo'. No obstante, las vocales largas se han acortado como ocurre con la a larga en la segunda sílaba de la palabra hulan. Muchas consonantes que fueron sílabas cerradas, incluyendo la r, se han perdido en santa. Por ejemplo, en mongol medio bulag 'primavera' se ha convertido en bula; marghasi 'mañana' en magashi. Las consonante -l y -m han cambiado a -n, siendo el resultado de estos cambios que la n es la única consonante que cierra sílaba. Las vocales frontales ö y ü han cambiado su pronunciación y ahora no se distinguen de o y u.

Los casos genitivo y acusativo van marcados con la misma partícula.

Los muchos cambios que ha experimentado la lengua se pueden atribuir a los siglos de contacto que sus hablantes tuvieron con grupos chinos septentrionales. La tendencia a la sílaba abierta es típica de los dialectos mandarines, al igual que el cambio de -m a -n final. Una particular adaptación al chino se aprecia en la construcción usando la cópula china shi 'es'. Esta cópula se pone en la sentencia en el orden sintáctico chino entre los nombres, pero se mantiene también la antigua cópula mongol en su posición usual al final de la frase, siendo el resultado una extraña construcción copular doble que no es china ni mongola, como X shi Y we 'X es Y es'. 

La lengua santa tiene alrededor de un 30 por ciento de vocabulario consistente de préstamos chinos.