La lengua asháninca o asháninka se habla en el departamento peruano de Junín y al norte del departamento de Cuzco, en los ríos Apurímac, Ene, Mantaro, Perené, Tambo, bajo Urubamba, bajo Perené y afluentes. En 1987 la guerrilla de Sendero Luminoso comenzó a reclutar jóvenes asháninka, siguiendo una campaña de genocidio en los valles de Apurímac, Ene, Perené y Tambo contra los asháninka que fueron esclavizados hasta la muerte cultivando coca. Al menos 2.000 fueron asesinados por intentar escapar o por caer enfermos. Otros 5.000 fueron retenidos cautivos, siendo liberados en 1992 y 1993 unos 3.550 por la fuerzas armadas y por las propias unidades de defensa asháninka. Hay unos 20.000 hablantes de un grupo étnico con esa cifra. Hay un programa de educación bilingüe. Está potencialmente amenazada. En Brasil, donde se denomina también kampa, se habla en el estado de Acre, en la frontera con Perú, entre los ríos Amônia, Arara y Breu afluentes del Juruá y el Envira, afluente del Tarauacá, en Terra Indígena Rio Amônia. Es un grupo étnico de algo más de 800 miembros y su lengua está amenazada.
|