A la llegada de los españoles el grupo chimila consistía de unas 10.000 personas, ocupando vastos territorios desde Río Frío y las faldas noroccidentales de Sierra Nevada de Santa Marta hasta Mompox y la Ciénaga de Zapatosa; desde la margen derecha del río Magdalena hasta las cuencas de los ríos Ariguani y Cesar. Actualmente el grupo chimila está limitado a un territorio marginal en las llanuras de San Ángel en el departamento de Magdalena. En el pasado los chimila han sido erróneamente identificados con los arahuacanos.

La lengua chimila (chamila, ette taara) se habla en el departamento colombiano de Magdalena, en la región de Sierra Nevada de Santa Marta, en las tierras bajas cerca de Valledupar. Aunque la lengua todavía es vigorosa en el grupo étnico que cuenta con 900 miembros, se considera amenazada.